El ministro de Economía mantuvo reuniones de trabajo en Houston con ejecutivos de Chevron, Exxon, Total, Shell, BPX Energy y Pan American Energy; buscan elevar la producción ampliando la disponibilidad de divisas para las empresas
HOUSTON.- Sentado en una mesa redonda con ejecutivos y expertos de la industria petrolera, Sergio Massa dijo que el Gobierno estaba comprometido en que la Argentina fuera “un jugador central” en el mercado global de energía –muy estresado por la guerra en Ucrania–, que mira al yacimiento de Vaca Muerta con una sensación conflictiva de entusiasmo y frustración ante las idas y vueltas y los traspiés del país para explotarlo. Massa le prometió a las empresas cambiar esa historia.
Luego de su primer contacto con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en Washington, Massa viajó anoche a Houston en el Tango 04, el avión oficial que utiliza en su gira por Estados Unidos, para forjar una nueva alianza con las petroleras y presentar sus planes para crear un marco estable y duradero que aliente inversiones en el sur y logren elevar la producción de gas. Es un área prioritaria para el Gobierno, estratégica para el desarrollo del país, y que el mundo –en particular, Estados Unidos– mira ahora con mucho más interés por el conflicto desatado por la invasión rusa a Ucrania. Massa dijo que la Argentina necesita “reglas claras” y ha asumido el compromiso de “ser un jugador central en la agenda de seguridad energética de los próximos años”. Una posibilidad: duplicar el PBI en siete años.
El ministro de Economía, Sergio Massa, con la comunidad de negocios e inversores del sector energético de EE.UU., organizado por el Instituto Baker (Rice University), en Houston, Texas.
“Estamos hablando de un sector que, con incentivos alineados y seguridad, le puede representar a la Argentina una duplicación del producto en siete años similar a lo que representan los agrobusiness en el producto bruto interno de la Argentina”, graficó Massa, al abrir la cita.
Lo escuchaban ejecutivos de Chevron, Exxon, Shell, Total, Axion, Tenaris y Equinor reunidos en una de las salas del Instituto Baker, en la Rice University, por donde han pasado todos los presidentes de Estados Unidos de las últimas décadas, y también mandatarios extranjeros, como Nelson Mandela, Tony Blair o Mikhail Gorbachov. Massa llegó acompañado por su asesor internacional, Gustavo Martínez Pandiani, la secretaría de Energía, Flavia Royón, y desde Buenos Aires se sumaron el presidente de YPF, Pablo González, y de Enarsa, Agustín Gerez.
Mark Jones, profesor de la Universidad Rice y un viejo conocido de Massa, lo recibió en la entrada con un fuerte abrazo se deshizo en elogios al presentarlo como “el James Baker argentino”, en referencia al secretario de Estado de Ronald Reagan, una de las figuras emblemáticas de la diplomacia norteamericana.
El ministro Sergio Massa, con la secretaria de Energía, Flavia Royón, y el presidente de YPF, Pablo González, durante la reunión en Houston, Texas
“Sabemos que la situación de la Argentina es complicada y hace falta hacer muchas cosas en poco tiempo. Y lo que necesita es alguien que puede tender puentes, no romper puentes. Alguien que puede resolver conflictos y no hacer quilombos”, bromeó Jones. “Alguien que puede hacer lo que hizo James Baker”, dijo.
“Cambio perceptible”
Massa dijo que era importante construir “políticas de Estado” para clarificar el horizonte para las empresas, una falencia de larga data de la Argentina. El país, dijo, no necesita una planta de Gas Natural Licuado (GNL), sino “varias plantas”, y que el tiempo para explotar los hidrocarburos se agota por la transición global hacia las energías limpias debido al cambio climático. Luego dejó una de las novedades: dijo que el Gobierno reactivará el régimen que creó el gobierno de Cristina Kirchner, en 2013, para alentar el desarrollo de Vaca Muerta –con el llamado “decreto Chevron”–, que quedó suspendido durante la administración de Mauricio Macri.
“Tenemos que establecer incentivos y en todo caso planificar, sobre la base de la capacidad de utilización de reservas y los proyectos de inversión, la disponibilidad de las divisas, que a veces se enfrenta con restricciones del Estado”, explicó.
Sergio Massa participó de una reunión de trabajo con los representantes de ExxonMobil, Bryan Pickett, gerente general de No Convencionales para la Argentina; y Daniel De Nigris, gerente general Exploration Argentina. Analizaron los avances e inversiones de la empresa en Vaca Muerta
Massa presentó una estrategia con tres frentes: el lanzamiento del plan GasAr 5 para aumentar la producción y garantizar el llenado de los nuevos gasoductos que están en construcción; un trabajo que se hará en el Congreso para impulsar una ley que priorice el desarrollo del gas natural líquido e hidrógeno y brinde un marco estabilidad a largo plazo, y la reactivación del régimen creado por el llamado “decreto Chevron”.
En 2013, YPF, durante la gestión de Miguel Galuccio, selló una alianza con Chevron para invertir 1240 millones de dólares para perforar más de 100 pozos de petróleo. El acuerdo permitía el giro de utilidades una vez que se lograra un determinado nivel de producción. La intención del oficialismo es que el esquema, suspendido durante el gobierno de Macri, ayude a normalizar las relaciones con las empresas al reinstaurar un beneficio que estaba en el limbo. La iniciativa se implementará a través de una resolución de la Secretaría de Energía.
Un ejecutivo presente indicó que la reactivación del régimen para poder girar dividendos implicaba una “normalización” y “cumplir con lo que no cumpliste”, pero que era, con todo, un paso hacia adelante para crear confiabilidad y recuperar credibilidad. Pero el camino a completar todavía parece largo. Bryan Pickett, Gerente General de Unconventionals, Argentina & Central Unit de Exxon, dijo que el encuentro con Massa había sido “sumamente positivo”, y que era importante que la industria trabaje con todos los niveles de gobierno para desarrollar Vaca Muerta
Francisco Monaldi, director del Programade Energía de América latina de la universidad, remarcó que el contexto internacional favorece a Vaca Muerta, y la Argentina es el único lugar fuera de Texas donde la industria ha puesto los ojos para desarrollar el shale gas. “En la Argentina se requiere algo mucho más arriba que decisiones del Gobierno, son políticas de Estado, de cambios legislativos”, indicó Monaldi a los periodistas. Con todo, el mensaje de Massa, agregó, dejó “un cambio muy perceptible en las compañías en cuanto a la sensación de que se les está dando una prioridad que no tenía antes el sector”.
Fuente: La Nacion
En diseño, sustentabilidad y programación, Añelo Nuevo marca el futuro de la construcción en Vaca Muerta. La finalización del edificio está prevista para finales de XXX.